En el casco antiguo de Lausana, Suiza, es muy común hacer turismo en bicicleta prepago. Es un sistema muy sencillo que actualmente se ha puesto de moda en muchas ciudades europeas. Hay varias estaciones de autopago donde se pueden alquilar una bici, utilizarla el tiempo que se necesite y devolverla en cualquier otro punto de la ciudad que tenga estación. Las rutas con las bicicletas en el centro histórico son muchas, pueden visitarte: el Castillo de Sainte Maire, delo siglo XV; el Ayuntamiento, del siglo XVIII; la medieval Place de la Palude; la iglesia de St. François; y en lo más alto la Catedral de Notre Dame.
La torre de la Catedral todavía habita uno de los pocos vigías que aún se conservan en Europa. Todo comenzó en la Edad Media, era muy común que estas personas se encontraran en las iglesias y catedrales porque eran las construcciones más altas de pueblos y ciudades. Su trabajo consistía en vigilar que no se produjeran incendios ni altercados entre la población. También se encargaban de tocar las campanas y cantar las horas a gritos desde las alturas.
Esta profesión aún se conserva en Lausana desde 1405. Su actual vigía es Renato Hausler que sigue cantando las horas todas las noches del año y dice "C'est le guet. Il sonné dix, il a sonné dix". Pero, ya no se necesita avisar de los incendios.
MGP
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