Rajastán I

Situado al noreste de la India, Rajastán es el segundo mayor estado del país con 342.239 kilómetros cuadrados de superficie dividida en dos por los montes Aravali. Su población alcanza los 56,5 millones de habitantes y la capital estatal es Jaipur.

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Es conveniente comenzar la visita en Rajastán por Pushkar, uno de los cinco lugares sagrados hinduistas más importantes del mundo.  La población de Pushkar, que cuenta con 20.000 habitantes, se erige alrededor de un lago. A lo largo de este último, encontramos más de 500 templos de los cuales el más destacable es el dedicado a Brahma, uno de los tres dioses del hinduismo. La peculiaridad  de este templo es que es el único dedicado al dios Brahma de toda India.  Sin embargo, lo mejor de este sitio es el lago, al que se puede acceder por las escalinatas o ghats.

La segunda ciudad más grande de Rajastán es Jodhpur, a cuatro horas de Pushkar.  Su monumento más importante es el fuerte de Mehrangarh, que se sostiene sobre un escarpado precipicio de más de 100 metros de altura. Otros puntos de obligada visita son los bien conservados zenana, palacios reservados a las reinas y mujeres.

Otras dos importantes ciudades son Udaipur  y Bikaner. Fundada en 1559, Udaipur fue sede de uno de los clanes rajput más importantes. La ciudad se asienta alrededor de tres lagos, en medio de los cuales se alzan palacios de mármol blanco, algunos convertidos en lujosos hoteles. Uno de los atractivos turísticos es navegar el lago Pichola por la noche para contemplar el City Palace, un conjunto de arquitectura militar rajput y mogol; y el palacio Jag Niwas.

La ciudad amurallada de Bikaner es famosa por su prosperidad económica, por sus caramelos y por el Fuerte Junagarth, uno de los más hermosos y completos de Rajastán. Al igual que la ciudad capital de Jaipur, Bikaner es la ciudad rosa. Hay que tener en cuenta que la arquitectura rajistaní se basa en la abundancia de colores que representan diferentes estados de ánimo. Por ello, encontramos casas pintadas de colores que contrastan con el mármol blanco. MSS